La Ley de la Intencionalidad

Celia Covarrubias
“El crecimiento no ocurre por sí solo”

La mayoría de las personas subestiman la importancia de casi todo en sus vidas. Se distraen, y como resultado, sitúan el crecimiento en un lugar secundario; y si crecen, es por accidente en vez de ser algo intencional.

¿Cuánto tiempo has programado intencionalmente para tu crecimiento personal?

Cuanto antes hagas la transición y comiences a hacer intencional tu crecimiento personal, mejor será para ti, porque el crecimiento aumenta y acelera si permanece siendo intencional al respecto.

Claves para hacer el cambio de un crecimiento accidental a intencional

1. Hazte las preguntas correctas ahora.
El camino del crecimiento es largo y continuo, no inicies preguntándote “¿Cuánto durará esto?” o “¿Hasta dónde podré llegar?”. Esto no te ayudará a fijar la dirección que quieres seguir, sino la distancia, y justo ahora no serás capaz de responderlas.

Comienza por realizarte las siguientes preguntas que fijan la dirección y el rumbo que deseas seguir:

  • ¿Dónde quiere ir en la vida?
  • ¿Qué dirección quiere tomar?
  • ¿Dónde es lo más lejos que se imagina que puede llegar?


Responder estas preguntas te dará el comienzo en el viaje del crecimiento personal. Lo mejor que puedes esperar hacer en la vida es sacar lo máximo de todo lo que ha recibido. Y tú haces eso cuando inviertes en ti mismo/a, mejorando en todo lo que puedas.

Cuanto más trabajes en ello, mayor será tu potencial, y más lejos deberías intentar ir. Invierte lo máximo en tu crecimiento para que puedas llegar a ser la mejor versión de ti mismo.
2. Afronta el factor miedo.

Estos son los cinco temores y factores que intervienen e impiden que la gente tenga éxito: 

  • Miedo al fracaso
  • Miedo a cambiar la seguridad por lo desconocido
  • Miedo a extralimitar la economía
  • Miedo a lo que otros dirán o pensarán
  • Miedo a que el éxito distancie a los compañeros


¿Cuál de estos miedos te impacta más? Podría ser el distanciamiento de tus compañeros porque eres alguien que tiende a agradar a la gente y quería caer bien a todos por naturaleza; pero realmente no importa qué miedo sea el que más te afecte. Todos tenemos temores, pero esta es la buena noticia: también todos tenemos fe.
3. Cambia del crecimiento accidental al intencional

Las personas tienden a anclarse en la vida. Entran en un modo fácil, y no intentan salir de él, aunque les esté llevando en una dirección equivocada. Después de un tiempo, tan solo se dejan llevar. Si aprenden algo, es debido a un feliz accidente.

¡No permitas que eso te ocurra a ti!

Si esa es la actitud que has desarrollado, ¡entonces harías bien en recordar que la única diferencia entre un bache y una tumba es la profundidad!

¿Cómo saber si has entrado en un bache? Echa un vistazo a las diferencias entre el crecimiento accidental y el crecimiento intencional:
CRECIMIENTO ACCIDENTAL: 
  • Piensas comenzar mañana.
  • Esperas que llegue el crecimiento.
  • Aprendes solo de los errores.
  • Dependes de la buena suerte.
  • Abandonas pronto y a menudo.
  • Desarrollas malos hábitos.
  • Hablas mucho.
  • Juegas a lo seguro.
  • Piensas como una víctima.
  • Confías en el talento.
  • Dejas de aprender después de graduarte.
CRECIMIENTO INTENCIONAL
  • Insistes en comenzar hoy.
  • Asumes toda la responsabilidad del crecimiento.
  • A menudo aprendes antes de equivocarte.
  • Confías en el trabajo duro.
  • Perseveras mucho y duro.
  • Luchas por conseguir buenos hábitos.
  • Concluyes.
  • Tomas riesgos.
  • Piensas como un principiante.
  • Confías en el carácter.
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